jueves, 9 de septiembre de 2010

25 de diciembre... fun fun fun


DICIEMBRE DE 2009 Y ENERO DE 2010

Los meses se pasaron volando, y ya era diciembre aunque no lo pareciese porque los días eran de playa.

En Alicante también tenía una rutina bastante planificada: clases por la mañana, academia y algunas clases por la tarde, noches en la residencia viendo películas y hablando... Algunos jueves salíamos al puerto de Alicante para pribar, y después íbamos o bien a algún bar de El Barrio, o a alguna discoteca, aunque a mí la música house no me gusta y prefería bares más tranquilos.

El nivel de la carrera era bastante alto, y teníamos una asignatura en la que teníamos que hacer trabajos muy largos para los que teníamos que estar levantados hasta las tantas de la madrugada, aunque al final siempre íbamos con prisas a imprimirlos y encuadernarlos...

Al final llegó el día de irme a casa por Navidad. Era 23 de diciembre. Esos días siempre había gente en casa, y mucho movimiento. El 24 era la cabalgata del Olentzero y después la cena de Nochebuena en casa de mis tíos, con todos mis tíos y primos. El día 25 el cumpleaños de mi hermano, por lo que había comida familiar en mi casa. Los demás días los pasaba con los amigos, echando alguna cerveza, jugando al mus o al póker o yendo al cine a Pamplona.

El día 31 era el mejor día del año. Estar con los amigos toda la tarde de bares y después ir a cenar con la familia; eso me gustaba. Cena agradable, campanadas, y después quedar de nuevo con los amigos para pasar la noche por los bares. A la mañana siguiente tenía una resaca impresionante, pero me levantaron de la cama para ir a comer a casa de mis tíos con los que celebrar el Año Nuevo.

De repente, fue como si la niebla se volviese a disipar en mi tendón y ese dolor molesto apareciese de nuevo. Desde septiembre el dolor y las molestias habían sido más o menos controlables y poco importantes, pero ahora mi tendón de aquiles atacaba de nuevo.

Las causas de la vuelta del dolor podían ser varias:

- Mucho ajetreo. Ir a casa de mis tíos, volver a mi casa, ir conduciendo hasta Pamplona, estar de bares, etc.
- Subir escaleras. Mi casa tiene dos pisos, y lógicamente subo escaleras constantemente (del salón a mi habitación y viceversa).

Descarté la primera causa debido a que en Alicante andaba incluso más que en Navarra. Pensé en la segunda causa. La verdad es que en Alicante no subía escaleras. Todo lo hacía en llano. Andaba muchísimo pero todo en llano. En la residencia de estudiantes siempre usábamos el ascensor, y en la universidad todas las clases las tenía en la planta baja. En cambio en mi casa notaba que cuando subía escaleras me molestaba más, incluso a veces cojeaba del dolor. Como si fuese el doctor House llegué a la conclusión de que mi dolor se incrementaba cuando subía escaleras, cosa muy normal ya que al subir escaleras o rampas el tendón de aquiles trabaja más.

Los primeros días de enero fueron bastante insoportables. No era un dolor fuerte, pero estaba ahí, y ya estaba cansado de esa molestia que arrastraba desde el mes de abril.

Mi padre conocía a un traumatólogo muy majo, y con un poco de enchufe me pudo ver en el hospital y me hizo unas radiografías. El traumatólogo me examinó, y tras ver las radiografías me dijo que todo era normal, que se apreciaba algo de tendinitis, pero poca, y que lo raro era que tenía un dolor muy selectivo e intenso en el calcáneo. Me examinó los pies y me dijo que tenía el pie un poco cavo, pero que no era nada anormal. Me recomendó ponerme unas taloneras de silicona, de forma que el tendón trabajase menos. Así, decía, la tendinitis podría irse. Como trabajaba en el servicio de urgencias no pudo verme más detenidamente, y me dijo que estuviese con las taloneras hasta Semana Santa, y que si seguía con molestias me examinaría más detenidamente y con más tiempo.

Así, que me fui con el diagnóstico de tendinitis aquílea en la inserción con el calcáneo, y me compré las taloneras que tenía que ponerme en cualquier calzado que llevase.

Y así llegó la noche de Reyes, y entre quedar con los amigos y estudiar alguna que otra asignatura, llegó el día 7 de enero, día en que tenía que irme a Alicante de nuevo.

Empezaban los exámenes de enero o, lo que es lo mismo, los días enteros de encierro en la biblioteca.

1 comentario:

  1. Me encanta tu historia. Yo tengo una parecida. Sigue contando más cosas. :D

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